El yoga Iyengar es el mejor estilo de yoga para principiantes e incluso para aquellos que practican yoga habitualmente, pero encuentran que sus articulaciones han perdido flexibilidad debido a lesiones u otras razones médicas.
Permite usar accesorios, como almohadones, cinturones y bloques con forma de almohada, para ayudar a lograr las posturas correctas sin tener que realizar un esfuerzo excesivo.
¿Qué es el yoga Iyengar?
Es un estilo de yoga conocido por su enfoque en la precisión, la alineación postural y el uso de accesorios como bloques, cinturones, mantas y sillas para facilitar la práctica y adaptarla a las necesidades individuales.
¿Cómo nació el yoga Iyengar?
Yogacharya Shri B.K.S Iyengar nació el 14 de diciembre de 1918 en una familia pobre de brahmanes en Bellur, India. Era el undécimo de trece hijos y nació durante una pandemia de gripe.
Siempre estuvo enfermo. Con los años, tuvo malaria, tuberculosis y fiebre tifoidea. Sus limitaciones durante la escuela, debido a su mala salud, hicieron que este adolescente buscara diferentes caminos para aprender más sobre su cuerpo.
Después de recuperarse de la tuberculosis, decidió mejorar su salud. Comenzó a aprender yoga en 1936. En aquel momento, su cuñado Krishnamacharya, quien sería su gurú, enseñaba yoga en Mysore.
Iyengar estaba tan rígido que cuando se inclinó para tocarse los dedos de los pies, sus dedos sólo pudieron alcanzar hasta las rodillas. Pero su determinación y trabajo duro valieron la pena. Se comprometió completamente con el yoga y estaba decidido a comprenderlo y practicarlo o morir en el intento.
Comenzó su aventura de enseñar yoga para mejorar la forma física con clases individuales. Uno de sus estudiantes fue el violinista Yehudi Menuhin, a quien conoció en 1952. La fama de Menuhin ayudó a promocionar el yoga Iyengar como marca en el mundo occidental.
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Estudió y enseñó yoga durante aproximadamente 75 años por todos los continentes y consiguió que el yoga fuera accesible y efectivo para todo el mundo. Es el hombre responsable de inventar la mayoría de los accesorios que se utilizan para esta forma de yoga.
¿Qué hace a Iyengar único?
El Yoga Iyengar destaca por ser una práctica inclusiva, adaptada a todos los niveles y capacidades. Aquí tienes las razones que lo hacen tan especial:
- Maestros altamente cualificados: Los instructores certificados de Yoga Iyengar reciben una formación rigurosa y extensa. Gracias a su experiencia, pueden guiar a los estudiantes para que comprendan su nivel individual y progresen de manera segura en cada postura.
- Uso de accesorios: Este estilo se caracteriza por utilizar herramientas como bloques, cinturones y mantas para facilitar las posturas. Hacen que este tipo de yoga sea accesible para cualquier persona, independientemente de su experiencia o limitaciones físicas.
- Alineación postural y beneficios: Con un enfoque en la alineación precisa, el Yoga Iyengar es ideal para tratar problemas posturales y estructurales. Además, concentrarse en los detalles de cada postura ayuda a reducir el estrés y la ansiedad.
- Esfuerzo consciente: Aunque pueda parecer más pausado que otros estilos de yoga, exige un esfuerzo consciente y un trabajo profundo para alcanzar el nivel esperado de precisión en cada postura. Esto intensifica los beneficios tanto físicos como mentales.
- Rejuvenecimiento total: Las clases, con sus posturas revitalizantes y enfoque metódico, te dejan con una sensación de energía renovada y un bienestar completo.
Cómo usar accesorios en la tradición Iyengar
El uso de accesorios es uno de los aspectos más distintivos del Yoga Iyengar. Estos elementos ayudan a lograr una correcta alineación en las asanas (posturas), haciéndolas más accesibles y minimizando el riesgo de lesiones.
Ejemplo: Utthita Trikonasana (Postura del Triángulo)
En esta postura, lo ideal es que la mano toque el suelo en la parte exterior del pie delantero. Sin embargo, muchas personas encuentran difícil mantener la alineación correcta mientras alcanzan el suelo, especialmente al abrir el pecho y alinear los hombros.
Aquí es donde los accesorios juegan un papel fundamental. Siguiendo la metodología de Iyengar:
1.Uso de un bloque:
Coloca un bloque debajo de tu mano inferior (generalmente la derecha) para elevar el apoyo. Esto permite mantener la alineación adecuada del pecho y los hombros sin forzar el cuerpo.
2.Alineación progresiva:
Con el tiempo, a medida que el cuerpo se abre y se fortalece, podrás reducir la altura del bloque o incluso prescindir de él, logrando la postura completa sin asistencia.
El propósito principal de los accesorios no es solo facilitar la postura, sino también garantizar que se practique de manera segura y efectiva, respetando las capacidades individuales del practicante. Esto fomenta una práctica más inclusiva y libre de lesiones.
Este es un ejemplo en el que el método de Iyengar hace que el yoga sea más accesible para mucha más gente.
Beneficios y contraindicaciones del método Iyengar
Beneficios del método Iyengar
Los beneficios del Iyengar son físicos, mentales y emocionales gracias a su enfoque en la precisión y alineación postural. Mejora la fuerza, flexibilidad y equilibrio, corrigiendo problemas estructurales y posturales. Su atención a los detalles reduce el riesgo de lesiones, siendo seguro para todas las edades y niveles.
Fomenta la concentración y atención plena, aliviando el estrés y la ansiedad. Además, el uso de accesorios como bloques y cinturones permite adaptar la práctica a personas con limitaciones físicas o problemas de movilidad. También tiene efectos terapéuticos, aliviando dolores crónicos, mejorando la circulación y fortaleciendo músculos estabilizadores.
Contraindicaciones del método Iyengar
Aunque inclusivo, el Yoga Iyengar requiere precaución. Personas con lesiones graves o enfermedades crónicas deben consultar a un médico antes de practicar. Algunas posturas pueden agravar problemas como hernias o lesiones de espalda y necesitan adaptaciones.
Es esencial practicar bajo la supervisión de un instructor cualificado para evitar malas alineaciones y tensiones. Ignorar molestias o practicar sin guía puede incrementar el riesgo de lesiones, incluso en este método seguro.
Qué esperar de una clase de yoga Iyengar
Una clase de yoga Iyengar debe conseguir agotarte físicamente, estimular tu mente y calmar tu espíritu. El primer paso es olvidarse de todas tus ideas preconcebidas.
La apertura del pecho tiene un fuerte impacto en aquellas personas que practican yoga por primera vez. El yoga Iyengar te enseñará a realizarlo correctamente y a valorar su importancia. Puede llegar a ser una experiencia emocional muy intensa, ya que te proporciona una sensación de empoderamiento.
Tu punto de partida puede ser sentir la planta de tus pies. Aprenderás lentamente a equilibrar tu cuerpo repartiendo su peso de forma uniforme sobre tus pies.
A partir de ahí, comenzarás a fortalecer tus piernas para que sean lo suficientemente robustas como para levantar y sostener tu columna vertebral. Aprenderás a estar más erguido y a quitar la tensión innecesaria de tu espalda.
Las asanas incluidas en la práctica varían de una clase a otra dependiendo de la habilidad de los estudiantes. Generalmente incluyen posturas de pie, sentado, flexiones hacia adelante y hacia atrás, giros, inversiones y posturas de recuperación.
Las diferentes asanas tienen diferentes efectos en la mente y el cuerpo. Trabajar con accesorios es muy característico en este estilo de yoga y le permite al cuerpo actuar y relajarse simultáneamente.
La clase siempre terminará con Savasana donde descansarás físicamente. La alineación debe ser adecuada y será revisada por los maestros para facilitar la relajación uniforme.
Permite que los sentidos se difuminen lentamente, ralentizando la respiración y calmando la mente, permitiendo la unidad del ser, la respiración y el alma. Este vínculo se llama «yog» o unión.
El experimentar este poder transformador en primera persona, refuerza y allana el camino hacia una práctica regular y consistente. Además, provoca una mayor sensación de salud y bienestar.
Posturas principales de Iyengar yoga
Te detallamos algunas posturas de yoga más habituales para esta técnica:
- Tadasana (Postura de la Montaña): Postura básica que mejora la alineación corporal, fortalece las piernas y fomenta la conciencia postural.
- Utthita Trikonasana (Postura del Triángulo Extendido): Estira los lados del cuerpo, fortalece las piernas y abre el pecho.
- Virabhadrasana I y II (Postura del Guerrero I y II): Posturas de fuerza y equilibrio que fortalecen las piernas, abren las caderas y el pecho.
- Adho Mukha Svanasana (Postura del Perro Boca Abajo): Estiramiento completo que alivia la tensión en la espalda, mejora la circulación y fortalece brazos y piernas.
- Paschimottanasana (Flexión hacia adelante sentado): Estira la espalda y los isquiotibiales, relajando el cuerpo y calmando la mente.
- Sarvangasana (Postura sobre los Hombros): Fortalece la columna, mejora la circulación y calma la mente; conocida como la “reina de las posturas”.
Nota final
Basado en Hatha yoga, es un tipo de yoga muy practicado en todo el mundo. Esta forma de yoga se centra en la alineación y enseña el método correcto de cada postura.
Si el cuerpo está alineado con precisión, entonces la respiración también se alineará con esa misma precisión. Esto ayudará a equilibrar la mente, los sentidos y las emociones.
Como el enfoque se centra principalmente en las cualidades y necesidades de cada persona, la práctica es altamente terapéutica.
El maestro te ayuda a concentrarte en los matices de cada asana hasta que se logre la alineación adecuada. Esto lo hace particularmente recomendable para problemas posturales y estructurales.
Ya seas un principiante o un yogui experimentado, su práctica te ayudará a mejorar tu salud y disfrutar de una mayor calidad de vida.